Vuelo al Polo sur geográfico

Empezamos el segundo con una visita de reconocimiento de Patriot Hills. El guía nos introducirá en los detalles medioambientales y de seguridad para nuestra estancia así como detalles sobre las condiciones meteorológicas y logísticas para nuestro vuelo al Polo Sur.

Después, podremos recorrer las inmediaciones del campo y conocer la vida diaria en la Antártida así como las diferentes actividades que se pueden realizar.

Nuestro vuelo al polo sur despegará en el momento en que las condiciones climáticas sean óptimas. Una vez lo sean, tras el desayuno nos dirigiremos al extremo sur del mundo. Aunque el plan previo es volver el mismo día, cogeremos los sacos de dormir y comida en caso de que el tiempo empeore y tengamos que parar en ruta.

El vuelo al polo dura aproximadamente 6 horas desde Patriot Hills. Debajo tendremos un manto blanco, el Sastrugi, una nieve moldeada por el viento que ocasionalmente tiene zonas de grietas y parece que sea infinita.

En ruta pararemos durante una hora en las montañas Thiel para que el avión pueda abastecerse de combustible. Allí, tendremos la oportunidad de estirar las piernas y de tomar una bebida o un snack.

A medida que nos acercamos a los 90º Sur veremos a la distancia el edificio de la estación de investigación Amundsen–Scott. Aterrizaremos en la pista helada y nos dirigiremos hacia la estación científica. Allí las temperaturas pueden variar de -35ºC a -25º C y la altitud de 3.300 m nos dificultará un poco la respiración. Nuestra visita al polo durará unas 3-4 horas.

A la llegada, nos reuniremos con un representante del Programa antártico estadounidense que nos acompañará dentro de la base. Además de conocer algunos de los trabajos de investigación que se llevan a cabo en la base, podremos comprar algún souvenir y enviar una postal desde el mismo polo sur.

Después saldremos nos dirigiremos al punto que marca el Polo Sur geográfico donde podremos hacernos fotografías e imaginarnos lo que debió suponer para los exploradores el llegar hasta aquí después de meses de viaje en trineo y esquís.

Al final del día volveremos al Patriot Hills donde tendremos una cena para celebrar nuestra conquista.

Durante nuestra estancia en Patriot Hills podremos hacer tours en motos de nieve por las montañas, excursiones para ver formaciones de hielo y roca inusuales, esquí de travesía y algunos trekkings por el vasto paisaje polar. Los fotógrafos disfrutarán de formaciones de hielo y nieve, espectaculares montañas y el sol de media noche.

Y llegó el momento de despedirse de uno de los lugares más aislados y remotos del planeta. A la hora convenida saldremos en el avión para regresar a Punta Arenas. A la llegada a Punta Arenas, traslado al hotel y alojamiento.

Nota: Se harán los esfuerzos necesarios para cumplir con el itinerario descrito aunque este siempre estará sujeto a cambios dependiendo de las condiciones climáticas o del avión.